Certamen de Haikus
El día de San Valentín, tan denostado por algunos y apreciado por otros, suele no pasar desapercibido en el territorio adolescente de los institutos. Cierto nerviosismo perceptible una semana antes, a pesar de la estudiada indiferencia para proteger la propia intimidad, miradas que matan o suplican una correspondencia, pequeños gestos en los pasillos, demoras intencionadas en la bajada o subida de las escaleras… En fin, mariposas en el estómago y las benditas hormonas a flor de piel presagian la cercana celebración de la fiesta del santo romano…